Antaño, los pastores pasaban largas temporadas fuera de casa, meses, cuidando los rebaños.
A las Bardenas de Navarra, al sur de Euskal Herria, llegaban desde los valles del norte, Roncal, Aézkoa y Salazar, sobre el mes de Septiembre, con miles de ovejas, algunas cabras y algún choto, en busca de pastos para alimentarlas durante el otoño y el invierno.No tenían vehículos ni teléfono ni medicinas, dormían en corralizas viejas en cama de paja y a veces a la intemperie;sin agua potable,debían acercarse de tarde en tarde, al pueblo más cercano, en el burro,para comprar pan, carne y sobre todo,para llenar las vasijas de agua buena para beber y cocinar.
La comida, había de ser humilde;alubias,tocino,pan..
Y para aprovechar el pan duro, con algo de sebo de cordero, agua y sal, hacían unas migas.
A estos ingredientes básicos, a veces se añadía algo de longaniza, tocino, e incluso setas y uvas
recogidas por los alrededores.Comida de pastores también en Aragón,Castilla,Extremadura..etc.,con variaciones, pero con la misma
base del pan seco.
Cuando éramos pequeños, en días oscuros de frío y lluvia, a veces nieve, preparar las migas al calor del hogar y comerlas, la sartén en medio y cada uno su cuchara, era para nosotros algo especial, como
un ritual en el que dabas gracias de estar allí con tu familia, a cobijo.Hoy en día, sobre todo en invierno, seguimos haciendo este guiso tan humilde y tan placentero.
Es costumbre que, cuando un comensal quiere parar para beber, deja la cuchara apoyada en la sartén
Necesitamos:
- chistorra o chorizo
- tocineta (panceta)
- pan duro ( como 1/2 barra por persona)
- aceite de oliva- manteca de cerdo
- ajos
- sal
Con un cuchillo de sierra rebanamos el pan finamente sobre un paño de cocina.
Hacemos un atillo con el paño y vamos machacando las migas que están dentro ,hacia atrás y hacia adelante hasta que queden a nuestro gusto.
En sartén amplia y profunda,freímos longaniza y panceta con un poco de aceite y un poco de manteca, una vez tostadito, separamos a un plato.
En la grasa que ha quedado,freímos unos ajos picados y añadimos un tazón de agua(según gusten de mojadas o secas, echaremos más o menos) y sal,dejando hervir un poco.
Ahora se añaden las migas y se van mezclando bien, bastante rato,sin olvidarnos de incorporar el chorizo y la panceta que habíamos separado porque así estarán más crujientes.
(Tengo una foto estupenda-jajaja, como todas las mías- del montón de migas recién cortadas, pero no sé qué le pasa al Bluetooth y no puedo pasarla del móvil al ordenador.)
A mí me gustan con un huevo frito, que a yema de rompa por ahí... qué rico.
ResponderEliminarFantásticas Miren.
Un besín
uyyy Migasss!!! yo las he comido sólo una vez y estaban bien buenas! te han quedado superbien Miren!!! que ganitas de probarlas otra vez!!!
ResponderEliminar;-)
Miren, el otro día me comento mi hermana que estaba comiendo migas y me dije las tengo el gusanillo. Solo las he comido una vez y me encantarón (en un bar). Ya no tengo escusa me la apunto y ya te contaré...
ResponderEliminarDe todas formas que pedazo de pinta que tienen.
Besotessssss
Que curiosas tradiciones! nunca las he comido, pero se me hace la boca agua al describirlas... que pases buen fin de semana! besitos
ResponderEliminar¡Qué ricas que son las migas!. Es un plato como para preparar hoy...
ResponderEliminarYo comí una vez unas migas manchegas y me quedé encantada!!!!!
ResponderEliminarQué curioso lo de......... ¡mojón!
Besitos!!!!!!!!!!!!!!
Ummm a mi me gustan con el huevo como a Isabel, y con lo que les pongas, las migas me chiflan siempre. Y con la pinta que han quedado las tuyas, solo me hace falta una cuchara ... si puede ser grande grande!!
ResponderEliminarbsts. maite
Gracias a tod@s por pasar por aquí.
ResponderEliminarSí, con el huevo están de miedo, también con setas, incluso con sardinas o anchoas.
Y de postre, mandarinas o uvas.
Un abrazo.
Cómo nieva!!.
Son muy famosas las migas, pero yo nunca las he probado. ahora, con tu receta, ya no hay excusa.
ResponderEliminarUn besín y feliz super-puente
Pues sí, la tradición no debería perderse...Es verdad que son platos calóricos; pero podemos hacer raciones más pequeñas, o comerlas de vez en cuando...¡ merece la pena!
ResponderEliminar¡Me encanta tu Blog!
A mi me encantan las migas, no me importaría comer un platito de estas.
ResponderEliminarBesos.
Tengo a mi hija que las migas, le encantan, cuando tenía unos 12 años llamaba a mi madre para que le hiciera migas, (la verdad y lo tengo que decir a mi madre le salían mejor que me salen a mi)
ResponderEliminarHumm!! Sans doute très savoureux;)xxx
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