Mingranas, milgranas, granadas, frutas llenas de otoño rojo.
Además de sus supuestos efectos afrodisíacos, son una fuente de antioxidantes, fibra, vitaminas y minerales. Se sabe que Hipócrates utilizaba jugo de granada para tratar la fiebre y las enfermedades del aparato digestivo.
De sabor dulce y delicioso, tienen el inconveniente de las pepitas para algunas personas, para ell@s , esta gelatina.
El mingrano es un arbusto o árbol pequeño, muy bonito, con mucho ramaje y hojas brillantes. Sus flores rojas anaranjadas son preciosas como lo será después el fruto.
Sólo vamos a necesitar,
- zumo de granada natural
- gelatina en polvo o en hojas, la cantidad indicada en el envase según la cantidad de zumo.
Con el zumo recién exprimido, preparamos la gelatina según las indicaciones del envase y dejamos solidificar en moldes.
He estrenado unos monísimos de un regalo que me tocó en el blog de Pilar, Cazuelicas. Todavía no les he pillado el punto de desmolde, se admiten consejos.
Un capricho de regalo de verdad, gracias Pilar.
Podemos reducir al fuego algo de zumo con azúcar y unas gotas de zumo de limón, para conseguir una especie de melaza y rociar las gelatinas.
Más fácil imposible, además de sana y deliciosa gelatina.